(Barcelona)
Punk is not dead
Bienvenidos a un nuevo episodio de este podcast. Volvemos a Barcelona para entrevistarnos con un escritor de graffiti que empezó su andadura en 1989 en Esparraguera, un pequeño pueblo catalán. Sus nombres Nozam, Noz, Mad2, Yogur, Sec29, Peso y Weso. Ha sido componente de los grupos Paralel32, MCK (Magnates Colors King), FTN (Fuck The Nation), DGW, CBS (Cazabombarderos), GC (Graffiti Club), MBT, 12kru, y Amx ( Amox) del que sigue formando parte a día de hoy.
Lo tenemos con nosotros para explicarnos su historia que para el mundo del graffiti empezó cuando tenía 12 años. En la conversación, Hen y Musa hacen las voces de anfitriones.
Esperamos que os guste.
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Orígenes
Yo nací en Terrassa pero a los 6 años me fui a vivir a Esparraguera. Empecé a bailar break a los 10 años, en el 86, en el barrio era la moda pues emitían el programa Tocata en la tele. Yo bailaba con los grandes de 15-16 años.
Estuve un tiempo con el break, pero como era una moda, luego fui heavy, me hice una chopper con una bicicleta, me soldé unas barras delante y con otro colega íbamos así por el barrio. Estábamos entre el break y el heavy.
Al ver Beat Street y entender de qué iba la cosa, empezamos a pensar en los trenes. En el 92-93 yo iba al instituto en Martorell, donde estudiaba automoción, y repetí curso porque las dos primeras horas de clase- nadie en ese época iba a pintar a las 8 de la mañana- las dedicaba a pintar trenes en la cochera de Martorell.
Luego, empecé a pintar con 12 años, después de ver las películas Beat Street, y Electric Boogaloo. En Esparraguera, había firmas y me quedaba con los nombres, algunos eran nombres normales como los que se ponen en las puertas de los lavabos. También había dos personas que pintaban que venían de Barcelona los fines de semana y hacían algún graffiti. Yo veía todo eso pero no entendí que era un movimiento hasta que vi Beat Street. A partir de ahí empezamos a pintar y con 14-15 años ya empezamos a ir a Barcelona, que era donde vendían todas las cosas, fanzines y demás. Íbamos al Zero a pillar el CFC y ETN. Nos escribíamos con Sutil y Moockie. Hablo en plural porque éramos dos en el pueblo. También grabábamos cintas y todo lo que estuviera relacionado con el hip hop.
Nos escribíamos con ellos, porque teníamos 14-16 años, no teníamos coche y en Esparraguera no había tren. Teníamos que ir en bus hasta Martorell y desde allí coger tren para ir a Barcelona. Aparte, todo era muy lento, tenías que ir a buscar a la persona a su casa o llamar por teléfono fijo. Así que el modo que teníamos era hacer fotos e intercambiarlas. También lo hacía con gente de Madrid como por ejemplo Til (Flood) que tenía además un fanzine. Yo estaba muy interesado en coleccionar fanzines, y hasta hice un par, el primero, LNN con un sólo número y CZC con dos números.
1ª Pieza
Creo que la primera vez que pinté me llevó mi padre. No lo recuerdo exactamente, pero me parece que fue por mi cumpleaños. Me preguntó que quería y le dije: pintar. Me compró los botes y fuimos a pintar a la riera de Terrassa. En una zona, donde años después viví que era también la zona donde vivía Kos. Un poco más arriba había una nave pintada de SAC, pintada por Absure 2000.
A partir de ahí, empecé a juntar botes con la paga que me daban. Antes pintabas cada dos meses, porque no se podía hacer más. Juntamos unos cuantos botes, pintura plástica, y marcábamos las piezas a tiza.
También empezamos a robar pintura en las droguerías de barrio y cuando empezamos a ir a Barcelona robábamos en El Corte Inglés. Así pudimos hacer cosas más grandes.
La única marca que usé en los dos o tres primeros años fue Spray Color, y luego algún Felton y Dupli. También usábamos mucha plástica, incluso para pintar los trenes de mercancías de madera de Martorell.
Primeros Trenes
Dejé de poner Nozam porque en Martorell, por ejemplo, la policía me llamaba por ese nombre. Estaba muy “semado”, así que lo cambié. Los nombres más currados o trabajados que he tenido tanto de bombardeo como piezas, trenes y demás han sido: Nozam, Noz, Mad2 y Yogur.
Al ver Beat Street y entender de qué iba la cosa, empezamos a pensar en los trenes. En el 92-93 yo iba al instituto en Martorell, donde estudiaba automoción, y repetí curso porque las dos primeras horas de clase- nadie en ese época iba a pintar a las 8 de la mañana- las dedicaba a pintar trenes en la cochera de Martorell.
Justo enfrente de la estación había un apartadero de Renfe, donde estaban también los Ferrocarriles Catalanes. Vagones de mercancías de madera, cerrados y con puerta corredera que pintábamos a plástica y bote, porque Spray Color no es que fuera una maravilla, y las boquillas eran las que venían en el bote.
Teníamos que hacer inventos con la boquilla para conseguir diferentes trazos, como ponerle una aguja para el trazo fino o quitarle el punto para que saliese más grueso. También cogíamos válvulas de otros sprays, de laca de pelo o matamoscas.
Mi familia estaba al corriente de todo esto. Mis padres se separaron cuando yo tenía 5 años, y yo no ocultaba nada. Aparte, tenía toda la habitación pintada.
Nombres
El colega de mi pueblo que pintaba, escribía Nibelungo. Yo empecé pintando Lobo, porque tenía una tabla de skate que ponía eso. Después ya puse Wolf. También SezOne, como el de los 7 Malignos, pero no lo conocía. Estamos hablando del 89-90 en Esparraguera.
Más tarde empecé a poner Zam y lo escribí durante unos 3 años, pero vi que habían otros escritores que escribían Zam, Zams, Kezam… todos muy parecidos, así que decidí poner un “No” delante: Nozam. Eso sería en el 92-93.
Dejé de ponerlo porque en Martorell, por ejemplo, la policía me llamaba por ese nombre. Estaba muy “semado”, así que lo cambié. Los nombres más currados o trabajados que he tenido tanto de bombardeo como piezas, trenes y demás han sido: Nozam, Noz, Mad2 y Yogur.
Yogur fue un nombre que quise poner sólo durante un año, el 98. Lo puse en todos los formatos posibles: piezas, bombardeo, trenes, vías. Quería que se conociese rápidamente. Tenía la idea de un nombre que fuera fácil y reconocible y se me ocurrió mientras comía un yogur. Así de fácil.
A partir del 98-99 empecé a escribir Weso que es el que pongo ahora. Aunque también he seguido poniendo Nozam. En una época que engordé mucho escribí Peso en vez de Weso, por lo obvio. Con Sec29 tengo algunos Top to bottom.
Jams
Las jams eran otra manera de estar en contacto con la peña. Eso e ir a los garitos como el Jamboree, Train Club, Soweto y Studio 54. Las jams se anunciaban en la calle con algún cartel fotocopiado o hecho a mano, y se señalaba el camino con flechas hechas a spray. La gente que iba aprovechaba y daba flyers anunciando su jam. Un poco como se hace el circuito underground del punk. En el 94 empecé a ir más en serio con los breakers como Fran (Apel), y con Toni de Igualada. Todo ese círculo de break y graffiti desembocó en la creación del grupo 12Krú.
La jam más importante y la que cambió todo fue “Qué punto de fiesta” en Alicante, en el 93. Fuimos mi amigo Nibelungo, su hermana, Ryte y yo con toda la peña en bus desde Barcelona. Estabas tú María, y el Cling (ALL) entre otros.
Era increíble el ambiente del jam. Gente pintando en maderas para la exhibición, como JonOne, los BBC de París, Beto, Zeta y Chop, Dólar de Alicante, Tom Rock, Moockie, Kapi.. Muchísma gente.
Uno de los grupos que tocaba eran El Club de los Poetas Violentos, recuerdo que algunos de los que iban con ellos, llevaban bates de béisbol. Esa época era así, había esa fuerza y esa dinámica. Nosotros estábamos dentro y fuera, sin parar. Los breakers bailaban dentro pero también fuera sobre cartones. Al lado del edificio de la jam había un sitio abandonado y todo el mundo estaba pintando allí.
Por la tarde, oigo cómo les están pegando a mi colega Nibel. Fue un malentendido porque Pako King confundió el póster que llevaba mi amigo con un bate. Le pegó bien y le dejó muy marcado, él sólo tenía 14-15 años y su hermana se hizo cargo de él.
A pesar de la paliza, nosotros seguimos alucinados con todo lo que pasaba- éramos muy jóvenes-, disfrutando con la gente con la que íbamos normalmente al Train Club. Después de esa paliza, Nibel dejó de pintar.
Así eran las cosas en esa época. Todo era más crudo, sobre todo en Madrid. Amx, mi grupo es de allí, tengo muchos amigos, y estuve allí viviendo un año. Allí la movida era muy distinta. En otros lados pintas y no tienes por qué escuchar hip hop. Allí sí.
En el 95, fuimos a una jam en Zaragoza, donde pinté un Mad2 con Fran (él se pintó un breaker) en las chimeneas. Por la noche, la jam continúo en una especie de iglesia, donde vi por primera vez a Kase O, que tendría 15 años.
12 Krueles
Con 18 años tenía un curro nocturno estable en Terrassa y me compré un piso, pero me pasaba la vida en Barcelona y alrededores. Todos mis amigos y mi vida estaban allí.
En el 95-96 creamos los 12 Kru, que en principio eran A los 12 Crew, el nombre surgió de una broma privada una noche que estábamos todos en tu casa María. Era la única que vivía sola en Barcelona, nos quedábamos todos a dormir allí muy a menudo.
Los 12 éramos: Musa, Fran, Snat, Ose, Noga, Disop, Sice, Dim y yo.
Con los únicos que tengo contacto son Fran (por la amistad, pero ya no pinta) y con Musa. Con Snat, Noga, Disop y Ose tengo contacto por redes, pero no mucho. Me gustaría conectar más con Snat, pero la vida a veces no lo permite.
Los 12 éramos como una familia, hacíamos todo juntos. Viajes, fiestas, pintar muros y trenes. Fue una época muy divertida, en la que también viajamos bastante, y aprovechamos concursos de graffiti y jams para pintar trenes. Éramos un grupo hip hop: Ose y Disop cantaban. Fran bailaba y todos éramos escritores. No había dj en el grupo, a pesar de que tengo una colección de vinilos extensa (todo música negra, jazz, hip hop, funk, r&b, electro) y he pinchado en fiestas.
También pinché un tiempo en el bar Manolo, que estaba al lado del Moog, hasta que entró en Barcelona la nueva normativa sobre decibelios.
Nuestra vida social era 90% graffiti, nos reuníamos para dibujar en el Kabul, encima del Jamboree, o en el bar que había al lado del Bunker. El otro día encontré una caja llena de black books… con unas joyas..
Con los 12, recuerdo especialmente Vinaroz y Caudiel, en Valencia.
También en Madrid recuerdo una anécdota. Fuimos a la jam de Alcorcón del 95 que organizó Zeta, donde pintó Echo, Mode 2, Futura 2000 y todos estos… Esa fue la jam en la que los QSC tacharon al día siguiente todo lo que se pintó. Esas eran las movidas que había en Madrid.
Yo había ido con Fran la noche anterior para pintar. Fuimos a una estación muy grande de trenes mercancías donde también dormían los trenes de largo recorrido. Empezamos a pintar uno, y el rocío de la noche se mezcló con la pintura y me cayó en los ojos. Empecé a gritar porque me escocía y como no teníamos agua, le pedí a Fran que me escupiera. (os recomiendo escuchar el audio).
(Audio con la perspectiva de Fran sobre esa anécdota.)
El mosso iba corriendo, pegado a mí, creo que fueron 10-15 minutos donde podía notar su mano moviendo el aire, al tocarme la espalda. En un momento crucé las vías y caí por el torrente, un barranco que había tras unas zarzas. De la ostia que me pegué, el mosso, debió pensar que me había matado, se piró.
Después fuimos a dormir al local de Zeta y Chop y apareció Nico de Igualada. Se quedó a dormir allí también y le olían tanto los píes que tuvimos que echarle a pesar de que había tirado las zapatillas. Era insoportable.
Al día siguiente o a los dos días fuimos a pintar a cochera otra vez Fran, Noga, Musa y yo.
El grupo empezó a flojear por varios factores, Musa y Fran terminaron su relación, y entró la música máquina a tope en Barcelona y algunos del grupo se metieron a tope.
Esa fue también la época en la que yo compartía local con los breakers de Igualada. En la ciudad, estaba la discoteca Scorpia, Central del Sonido. En el local que estaba debajo del nuestro, se vendía una gran parte de la droga de Igualada. Veíamos y conocíamos a toda clase de personajes, yo tendría 17 años y eso me hizo que no probase las drogas nunca, a pesar de haber estado en ambientes donde había mucha drogas.
Por ejemplo, un día vino un chaval al que las drogas que se tomó le habían parado el corazón la noche anterior, y tenía las marcas del desfibrilador en el pecho. Mucha gente con tics nerviosos y los casos más heavys que recuerdo: dos chavales, uno que perdió la cabeza y otro que se quedó paralítico.
Estos dos vendían, entre otras cosas, tripis. Los tripis, por si no lo sabéis, iban en cartoncitos tamaño folio, troqueladas en cuadraditos muy pequeños, y en cada uno había una gota de ácido. Estos chicos, iban en moto, y se escondían las hojas entre el pantalón y la camiseta, por si les paraba la poli. Con el calor y el sudor la piel absorbía el ácido.
Marrones
Han habido unos cuantos, pero uno de los peores fue en Massanet. Estábamos pintando, aparecieron los Mossos, y salimos corriendo. Nos separamos. Unos fueron por la línea de Blanes, y yo fui por la de Paseo de Gracia. El mosso iba corriendo, pegado a mí, creo que fueron 10-15 minutos donde podía notar su mano moviendo el aire, al tocarme la espalda. En un momento crucé las vías y caí por el torrente, un barranco que había tras unas zarzas. De la ostia que me pegué, el mosso, debió pensar que me había matado, se piró.
Luego, dos o tres horas después, magullado por todos lados, me fui hacia el coche. Lo había dejado en un chatarrero, y mi polo rojo estaba hecho polvo. Escapé.
Otra vez en San Vicente, con Kaze y Fran pintamos un tren de día y vinieron los Mossos. Empezamos a correr por la vías y ellos nos perseguían en coche por abajo. Estuvimos corriendo hasta que llegamos a unos campos y nos escondimos en una caseta. Estuvimos como seis horas allí. Dentro de la caseta había un armario. Me quité la ropa de pintar para no dar la “sema” y resulta que era un pozo. Adiós ropa.
Otra vez en Soria con Spok, Dani de Igualada, y no sé quién más nos detuvieron y metieron en el calabozo. Al día siguiente fuimos a declarar, pero no tenían pruebas y nos querían hacer pagar mucho, diciendo que llevábamos años pintando allí.
NYC + METRO
En el 2005 fuimos a NYC unos cuantos, Noise, Pilón, Abismo, Done, Fanny y yo. Pintamos el metro sin problema, pero a la hora de echar la foto se decidió no hacerla para no tener marrón. Nos quedamos sin foto, y me dio mucha rabia, porque era una currada a color.
Ese viaje es recordado por la frase “No te mueras nunca Pilón” porque nos dio un poco el viaje.
Nada más llegar a la ciudad, a las dos de la mañana cogemos un taxi ilegal, y yo me dejo la cámara y el pasaporte. Por suerte a los 10 minutos, los chicos del taxi volvieron a devolverlos. Eran dos chicos negros y Pilón les pregunta: “¿Sabéis si aquí hay bandas?”. No sé qué películas tenía en la cabeza, pero estuvo raro y triste todo el viaje. Es un buen chaval.
También pintamos donde estaba Five Points, pero sin darnos cuenta pintamos justo enfrente, y nos avisaron que allí no era legal.
En el 2007 volví a NYC con mi pareja de ese momento, y los últimos días del viaje me fui a pintar solo. Le dije que se quedara en el hotel y que si pasaba algo que volviera a Barcelona.
Volví al mismo sitio del 2005 en la 180, pero la diferencia es que en 2007 ya había sensores. Yo sabía que la estación estaba lejos así que me daba tiempo a hacer algo rápido. Justo detrás había un edificio, donde estaban poniendo buena música y pinté muy a gusto. Además tengo foto. Me hice un throw up y me piré.
Lo gracioso es que para entrar, hay una puerta grande que es por donde entran los camiones. La puerta estaba cerrada con un candado del tamaño de una cabeza, y de no ser porque tenía un tornillo flojo, que desmonté, no hubiera podido entrar. Pero entré por la puerta grande.
Creo que la primera vez tuvimos demasiado miedo. Para mí era mi sueño. Si cojo y voy hasta allí, prefiero ir a la cárcel, pero quiero pintar y quiero mi foto. Al final por hermandad,o por estar bien con los demás me quedé sin foto.
El viaje del 2007 coincidió con el 25 aniversario de la peli Wild Style, y estuvimos en la fiesta en Central Park. Fue increíble y una oportunidad única porque muchos de los que estuvieron allí, han muerto a día de hoy. Allí es muy importante, porque es una seña de identidad. En los 70s había muchas bandas, mucha droga y guerras. El hip hop sacó a mucha gente de todo eso, y el graffiti también, porque estaba antes que los dj’s, los mcs etc.
También tuve la suerte de ver en Queens a Whodini, en un parque, rodeados de viejecitos sentados en sillas de camping. Soy ultra fan, colecciono vinilos desde niño. También vimos a Black Sheep, Laureen Hill en Brooklyn. Beastie Boys en Central Park. Visitamos el Hall of Fame de Harlem, el Bronx…
Madrid
Estuve un año viviendo allí, en el 2001, y me hubiera gustado quedarme más pero es una ciudad difícil, muy diferente a Barcelona en muchos aspectos. Tengo muchos amigos allí, y aprecio la ciudad, pero no para vivir allí. Antes de instalarme, estuve yendo y viniendo muchos años.
Allí pinté mucho y pinté de todo. Pinté muchos más metros que en Barcelona (aquí tendré 6 o 7) y también Renfe, paredes, etc.
El contacto empezó, creo, cuando Buny y Paz vinieron a Barcelona y les llevamos a una cochera. Hicimos muy buenas migas y a partir de ahí empecé a ir a Madrid más a menudo.
Estilo
Durante los primeros años, mis letras eran tipo imprenta, podría decirse, luego estuve muchos años haciendo estilo basura, y muchos de los trenes de los primeros años pertenecen a ese estilo, pero he hecho lo que quería, lo que me apetecía, y lo llevaba a mi manera. También me ha gustado mucho el estilo NYC.
Me gustaba mucho Wolf, un escritor increíble al que conocí gracias al intercambio de fotos con Sutil. Una vez me llegó un sobre con fotos de Dero, Reas que también me molan, y Wolf y flipé.
Pero antes nadie pensaba en eso. Tú pensabas en un amigo, un contacto, alguien que te enseñará la ciudad, alguien con quien te lo fueras a pasar de puta madre. Alguien que te diera su hogar, o un sitio donde tirarte en el suelo a dormir aunque fuese un garaje o un trastero, lo que fuera. Y divertirte, pasarlo bien, y si podías pintar pues bien. No te entendían muchas veces, muchos no sabían ni inglés y tu tampoco sabías tanto inglés como pensabas y llegabas allí a la aventura total. Quedabas con un tío en la estación central a las 3 de la tarde de tal día y quizá tu tren se retrasaba o lo habías perdido y el tío seguía esperando 4 horas, 5 horas allí. A mí me ha pasado… había una paciencia absoluta.
Con los españoles han tenido mucha paciencia porque todos éramos unos salvajes. Decían españoles.. buff.. (risas) Y era: “no, es que viene recomendado, es colega de otro, no te va a robar, no te van a hacer el lío.” Unas cosas muy guapas. Pero eso de descubrir, siendo niños, y no habiendo ido ni mucho menos a la universidad, y no haber ido a una biblioteca a documentarte de qué está pasando en esa ciudad: si era rica, cómo era la gente, la arquitectura, todo eso lo veías sin saber nada.
Filosofía del Graffiti
Al principio firmaba mucho, a spray y rotulador, pero ahora no tengo la mentalidad que tenía con 15 o 20, ni siquiera la que tenía con 30 y ahora soy un escritor dominguero. Y me gusta, porque me lo tomo con más calma y también me puedo dedicar a pintar cuadros.
De todas formas el graffiti que me gusta es por ejemplo lo que hace Buny, bombardear, piezas, trenes. Poner tu nombre por todos lados, como quieras pero por todos lados.
( Por cierto el día 7 de julio, pinchó en la inauguración de la expo del nuevo libro de Buny “El Militar”, en Canal Gallery. )
Dicho esto, todo está bien y si dentro de 10 años me lío a meterme tags por la calle, pues bienvenidos serán, porque para mí, es lo que he comentado antes de NYC, las firmas son para decir yo estoy aquí, estoy vivo y soy una persona. Es un grito.
Mi único límite moral es no pintar sobre algo artístico que haya hecho otra persona, porque ha empeñado su tiempo, su energía y su amor en hacer eso. No firmaría sobre algo así, incluso en las iglesias aunque no esté de acuerdo con ellas. Ése es mi límite, pero yo no decido por otras personas, y sé que lo que yo pinto puede molestar a otros.
Para mí, lo he hablado con otra gente, los cuadros, el arte, todo eso… es un contenedor donde depositar todo lo que tienes dentro. Pero todo lo que tienes o eres también lo eres en todas las circunstancias: cagando, leyendo, funcionando en la vida, con tus parejas, familia y amigos, en tu tag, en tu pieza o en un cuadro. Son solo formas de expresión.
Tengo que decir, que por ejemplo, me arrepiento de no haber visto el graffiti de otra manera. A veces he seguido el graffiti por las compañías y no he experimentado más. Llevo pintando cuadros toda mi vida, pero solo lo hacía como regalo de cumpleaños o en contadas ocasiones y es una cosa que me ha gustado mucho pero no le encontraba el sentido.
Tampoco le veo sentido al street art, por ejemplo. Me tira para atrás. Hay cosas que me gustan pero lo veo más como estructura de escuela. Supongo que tengo la mentalidad antigua de poner tu nombre por todas partes, el graffiti que hemos mamado los de nuestra generación y el street art, no me gusta, porque creo que va enfocado casi exclusivamente hacia el dinero o conseguir un trabajo.
El graffiti no tenía sentido cuando empezamos, gastabas dinero, te ocasionaba problemas, te manchabas… pero es tuyo, no lo han comprado, siempre te gustará y estará ahí.
Y en el street art y el mundo del arte eso no parece funcionar así.
Con eso no quiero decir que me arrepienta de nada, porque conozco a muchas personas, amigos, que han tenido una vida normal, hijos, mismo trabajo toda la vida… y está bien, y lo respeto, pero yo no soy así. Soy hiperactivo, y solo por dinero no he podido hacer todas las cosas que tengo en mente.
En esta sociedad, parece que la vida empieza el fin de semana, y cuando llega estás muerto de trabajar, y al final trabajas para pagar.
Mi libertad empieza cuando hago lo que quiero. Solo necesito pintura y vinilos y de estar montado de otra manera, se podría vivir trabajando solo 4 horas, en vez de 8.
Pero bueno, volvamos al graffiti…
Wei Ramirez y los breakers
Durante una época viajé mucho con los breakers. Les acompañaba como conductor a las actuaciones que hacían por la zona de Girona y la Costa Brava. Ahí vimos de todo.
También salí fuera con ellos y en uno de esos viajes, que fuimos a Miami a visitar a la pareja de Fran se nos ocurrió lo de Wei Ramirez. Allí para todo había que coger coche y empezamos a hacer una parodia del rap chungo. A mí me gusta el rap, pero hay una parte que parece teatro e hicimos una parodia de eso. Al final fueron 11 videos, cada vez más currados porque un amigo tenía acceso a escenarios, armas de atrezzo, etc. La mayoría de videos están censurados, pero con la tontería estuve haciendo la presentación del show de los breakers por Valencia y Zaragoza como si fuera algo serio.
Ahora lo pienso y Wei Ramirez era un poco trap.
Me gustaría escuchar la historia de...
Krash, o por ejemplo Sems, que es una persona muy acertada en todo lo que hace.
Os voy a dar un nombre de una persona que para mí es muy interesante. Pako. Lo conozco desde hace muchos años y su vida, si te la cuenta, es increíble. Siempre he pensado que un director debería hacer una peli o una serie sobre su vida.
Fue campeón de España de futbolín, y ganó un futbolín de verdad que estuvo en casa de Pau (SEIF) muchos años hasta que los vendieron. Tuvo tendinitis.
Despedida y cierre
La gente tiene que pintar graffiti, en la calle, donde quieran.. El graffiti es una pasada, viajas, conoces gente, vives experiencias muy buenas y es creativo. Todo lo demás es suplementario.
Anécdotas de Rocky.
